domingo, 10 de noviembre de 2013

"Quien te quiera te hará llorar"

Quédate con aquella persona que con mirarte a los ojos entienda que te estás cayendo a pedazos y sepa como reconstruirte. Que conozca todos los lugares de tu cuerpo. Alguien que te acaricie la espalda al despertar y te mire a los ojos con amor.
Quédate con aquella persona que te enfrente, que se preocupe por ti y te digas las verdades tal y como son, aunque duelan. Esa persona que te agarre la mano y no necesite de una fecha señalada para decirte "te quiero".
Quédate con quien te quiera, con quien cada abrazo y casa sonrisa sea especial y único. Ese alguien que te haga reír, ser feliz. Pero también te de discusiones, cada discusión es una muestra de amor. "Quien te quiera te hará llorar", dicen.
Quédate con quien acelere tu corazón con su "buenos días", que te haga el amor como si fueras la cosa más bonita del mundo y te bese en el hombro antes de dormir.

martes, 2 de abril de 2013

esta noche dime que me quieres.

No puedo evitar quitarte la razón cuando los dos sabemos que la tienes y aún seguir llevándote la contraria, hasta hacerte rabiar y decirte lo guapo que estás cuando te enfadas. Hacerme de rogar para que me supliques un poquito que te cuente las cosas. Esperar ansiosa para quedar por las tardes. Saber que no duermes igual si yo no estoy a tu lado. Levantarme por la mañana y pensar en ti como primera cosa del día. Sonreír al oír de tu voz un "te quiero" y pensar por dentro que yo también siento exactamente lo mismo. Escuchar día tras día esas payasadas que solo tu dices, de las que solo me rió yo y a las que aún no me he acostumbrado, pero no puedo negarlo me encantan. Echarte muchísimo de menos si no te veo o aunque te haya visto. Querer siempre un poco más de ti porque nunca tengo suficiente, todo el tiempo del mundo me parece poco par estar contigo. Preguntarte cosas que ya se solo para que me las vuelvas a contar. Molestarte cuando quieres dormirte o estar tranquilo y que luego me molestes tu a mí como venganza. Ir sonriendo a darte un beso cada vez que quedamos. Me encanta abrazarte y ponerme roja cuando me miras fijamente mientras me dices lo mucho que me quieres, es esa la sensación que solo tu consigues. No puedo evitar necesitarte a cada segundo, me haces falta.

lunes, 4 de febrero de 2013

.H-

Si algo debe quedar claro es que las palabras no se las lleva el viento, las palabras se quedan en la mente, se marcan en la piel. Sean susurros o gritos, sean palabras tristes o de amor. Y es que el mayor regalo que tenemos es el de la palabra; no significa que debamos utilizarla siempre, el silencio también es un regalo. Conecta a las personas en un momento mágico, y supongo que es eso lo que me unió a ti, tu forma de callar y decirlo todo, de mirarme y hacerme sentir cosas increíbles. Sentir el olor de tu ropa, el tacto de tus manos frías, el sonido de tu voz y el sonido de tu silencio. Enamoras, con tus mil virtudes y con tus mil defectos.
Te quiero y vivo con la certeza de que esto, no se lo llevara el viento; ni nada ni nadie.

lunes, 28 de enero de 2013

A tres milímetros de tu boca.

Será que el camino bueno se ha vuelto malo, o que no quiero pegar ni un palo, que solo quiero escuchar tu voz. Que siempre llego a la deshora que me marca el corazón y que cuando estamos a solas molesta el caparazón, el caparazón.


te quiero mucho.

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Tengo ganas de tus abrazos, de tus besos, de tus sonrisas, de que me hagas feliz continuamente, de tus besos en el cuello, de quedarnos dormidos mientras nos damos mimos, de despertarme a base de besos, de no separarme ni un segundo de ti. Por muy difícil que se pongan las cosas, te debo eso y más, me has hecho feliz durante mucho tiempo, cosa que nadie era capaz de conseguir.

Tengo ganas de ti.

:)

Es alguien que me hacer sentir diferente de todo lo demás. Es alguien que me hace sonreír, que me hace más fuerte, sentirme la chica más afortunada del mundo.

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Es imposible no darle un beso cada vez que sonríe, estar seria un minuto a su lado, no dedicarle una sonrisa cuando pone esa cara que solo el sabe o me coge de la mano o cuando se acerca a mi cuello para sacarme de quicio.